Rosas Negras te presenta los conceptos básicos que te permitirán construir tu propio jardín de rosas.
Las rosas tienen la propiedad de hacer que cualquier lugar, cualquier casa, cualquier oficina o cualquier recinto, tenga una apariencia distinta, más acogedora y más fresca. Por ende, resulta más placentero estar en un lugar que esté adornado con rosas, que un lugar hecho sólo a base de ladrillo o concreto. No sería una mala idea para su negocio o sus clientes el contar con un ambiente decorado con rosas, ¿no es cierto?
Hay un conjunto de técnicas o pasos que nos permiten maximizar esta experiencia y contribuir para que las rosas en nuestro jardín formen en conjunto un paisaje más complejo visualmente, es decir, más impactante.
Hallar las rosas adecuadas para formar un jardín de rosas no es algo complejo, ya que en la actualidad existen distintas especies o variedades con las que podemos contar. Sin embargo, un inconveniente que puede sucitarse es elegir los rosales adecuados para el ambiente y el uso que le queremos dar a dicho recinto.
Las rosas tienen una clasificación particular. Claro, todas tienen fines ornamentales, pero hay diferencias en los origenes de las rosas que, si conocemos de una forma adecuada, nos pueden ayudar para elegir correctamente el espacio.
Por ejemplo, hay un tipo de rosas conocidas como las "rosas de té" o "rosas tipo té", que son ideales cuando se desea ornamentar una caída, un enrejado en forma de cascada, o una superficie elevada con ventanas. Estas rosas son un tipo de flor silvestre, y si se disponen en forma de arco con una caída, ello brinda una buena experiencia para los visitantes.
Ahora bien, si no es su intención adornar un enrejado o una caída, y lo que debe es resaltar la imagen de una figura plana, como una pared que resulta el caso más frecuente, lo que le ayudaría es montar las rosas encima del muro en cuestión para que las rosas se inclinen sobre éste. Se trata de un efecto visual que puede considerarse común pero que es bastante recurrente por su belleza (ver la imagen).
Por otra parte, hay un tipo de rosa llamada Florinunda, que es una genial opción para decorar cuando se desea un toque de color chispeante, simétrico y vibrante. Este tipo de rosas tienen colores acentuados muy brillantes y es exquisito el decorar con ellas, porque se convierten en un punto inherente de atención.
Como recomendación bastante especial le presentamos a las rosas conocidas como versátiles: son las clásicas rosas que si se plantan en un jardín de tierra entre otras flores, resaltan de una manera intensa y sobre ellas recae la notoriedad visual.
Se debe entender que las rosas y su amplia gama de colores se debe considerar como la opción de crear una obra de arte; un cuadro a base de distintas pinturas en particular y que puede ser bastante atractivo el combinar siempre con el deseo de tener resultados parejos y de gran calidad visual.
Las rosas deben tener colores complementarios de acuerdo a su casa u oficina. Por ejemplo; un grupo de rosas de color rosa (valga la redundancia) quedan perfectas para un zaguán elaborado o revestido con piedras, o también con la elegancia del mármol.
Así mismo, las rosas blancas de té otorgan un buen contraste a una casa hecha de ladrillo rojo.
Por ende, el diseño de su jardín de rosas tiene una amplia gama de posibilidades que sólo depende de su creatividad.
